La pensión es una prestación económica destinada a proteger al trabajador al ocurrir un accidente de trabajo, al padecer una enfermedad o accidente no laborales, o al cumplir al menos 60 años de edad”, de acuerdo al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
En más de una ocasión hemos escuchado estos dos términos: pensión y jubilación, ¿has pensado cuál es la diferencia entre las dos? ¡Todos lo hemos pensado! Vamos a definir cada uno de los conceptos como aclarar sus diferencias.
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¿Qué es la pensión y cómo funciona?
Justo como lo definimos al inicio, la pensión es una prestación económica que la persona trabajadora recibe en caso de ocurrirle alguna de las siguientes situaciones:
- Sufre un accidente de trabajo
- Padece una enfermedad
- Sufre un accidente independiente al trabajo
- Al cumplir al menos 60 años de edad
¿Cómo funciona? Se realiza una resolución, la cual respalda el derecho al pago de un monto mensual y al servicio médico del IMSS, de esta manera se otorga la pensión.
En la actualidad, hay dos regímenes para la pensión, esta se establece por la fecha en que la persona comenzó sus cotizaciones en el IMSS:
- Régimen de 1973. Si se cotizó antes del 1ro de julio de 1997.
- Régimen de 1997. Si se cotizó a partir del 1ro de julio de 1997.
En el caso de que el trabajador o pensionado fallezca, la pensión protege a sus beneficiarios.
Diferencias entre pensión y jubilación
Jubilarse se define como “disponer que, por razón de vejez, largos servicios o imposibilidad, y generalmente con derecho a pensión, cese un funcionario civil en el ejercicio de su carrera o destino”.
La jubilación es cuando la persona trabajadora ha cumplido su etapa laboral y deja de trabajar, por ello recibe una pensión. Es decir, cuando una persona cumple su ciclo laboral, se jubila y el monto que recibe al retirarse es la pensión. Por lo que son dos términos completamente diferentes pero que mantienen una estrecha relación.
¿Cómo prepararte para la jubilación?
El momento de la jubilación es una etapa muy importante y que genera muchos cambios en la vida de las personas, las cuales van desde dejar de asistir al centro de trabajo, por lo tanto se ven enfrentados a la necesidad de adaptarse a nuevas rutinas y de igual forma a distintas emociones que esta etapa en sus vidas puede generar.
Uno de los elementos que más incertidumbre puede generar cuando pensamos en el futuro y en el retiro, es la estabilidad financiera que tendremos. Es importante que sepas desde hoy que esto dependerá completamente de haber previsto y realizado distintas acciones, como lo es el ahorro, para tener tranquilidad en ese momento.
Para la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro (CONSAR) existen 4 pasos a considerar para preparar tu jubilación, aquí te los dejamos:
- Diseña un plan financiero respecto a tu vida laboral, de él partirá tu plan de retiro.
- Debes establecer los objetivos que deseas cumplir al momento de la jubilación. Un tip para elaborar estas metas es que sean: específicos, medibles, alcanzables, realistas y estén delimitados por tiempo.
- Toma buenas decisiones en tu vida laboral para que tu ahorro en la cuenta AFORE tenga rentabilidad. Infórmate sobre rendimientos, comisiones, aportaciones voluntarias, por citar algunas.
- Por último, debes identificar cuáles será las fuentes de ingreso cuando estés en el retiro, algunas de ellas pueden ser:
- Tus ahorros
- Trabajo
- Bienes raíces
- Inversiones
Pensar en tu jubilación no debe ser algo negativo, es un error pensar que es algo que se resolverá cuando suceda. Planear la jubilación permite que disfrutes de esa etapa de tu vida con tranquilidad, así puedes emprender nuevas actividades o pasatiempos.
Recuerda, este es un texto informativo que contiene sugerencias. En Kueski no nos hacemos responsables por los resultados obtenidos al utilizar los productos/servicios aquí mencionados.
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